jueves, 1 de mayo de 2008

LA CHINCHILLA


Vienen de la época precolombina. Los Quechua utilizaban las palabras “Chin” que significa silencioso; “Sinchi” que significa fuerte y “lla” que es un diminutivo, y por la unión de estas tres palabras se llaman “silencioso, fuerte y pequeño”. ". En mapuche, "chilla", significa "Zorro pequeño". Los indios Chibcha proveyeron a los españoles de pieles y lanas, por lo que no se puede descartar que el vocablo tenga este origen.
A principios del siglo XX era tan notoria la cacería indiscriminada de estos animales que los gobiernos de Argentina, Chile, Bolivia y Perú suscribieron un acuerdo en 1910 con el objeto de prohibir la caza y la consiguiente venta de pieles.
Estos animalitos debido a la caza para hacer ropas con su piel estuvieron apunto de extinguirse pero gracias a que el estado unidense Chapman empezara a criarlas en cautividad hoy has una población de aproximadamente unas 8000 chinchillas.

Las chinchillas son animales estrictamente herbívoros y son originarias de una zona árida con escasa cobertura vegetal y donde las plantas tienen una elevada cantidad de fibra y un escaso valor alimenticio. Tienen un aparato digestivo especialmente adaptado a este tipo de alimentación y no ingieren nunca restos animales, como sí hacen los hámsteres.
Como la alimentación que toman en libertad no la podemos conseguir ya que provienen de otros países y no se adaptan a todos los climas tenemos estas opciones alimenticias que son las más adecuadas para ellos.
Heno: el henificado es un proceso de conservación de especies vegetales. Consiste básicamente en una deshidratación lenta al aire libre. En sí la palabra heno no indica composición ninguna. Para ser estrictos deberíamos decir heno de pasto o heno de alfalfa. Además están los henos “enriquecidos”, que son aquellos a los que se han adicionado plantas que por su olor o sabor son más apetitosos. Los hay con manzanilla, rosas, diente de león, jazmín, zanahoria, manzana… el 75% de la ración de una chinchilla debería ser heno debido a que es un alimento básico para ellos
Pienso: es el segundo componente en importancia para una correcta alimentación de las chinchillas. Desgraciadamente hay chinchillas que lo convierten, por apetencia, en su principal fuente de alimento. En algunos lugares todavía es difícil encontrar piensos para chinchillas. En estos casos se puede recurrir a los piensos para conejos enanos. Es importante que no sean piensos de engorde de conejos.
Mixturas: con este nombre englobamos una serie heterogénea de mezclas de diferentes alimentos. En este apartado podemos encontrarnos con productos de una calidad altísima o con productos de una calidad pésima. Entre los últimos están las mezclas de semillas para pájaros o hámsteres. Lo que parece ser que en muchas tiendas de animales olvidan, por lo que hay que tener en cuenta que las chinchillas no son granívoras. Son herbívoras, que es muy distinto.
Las mixturas de baja calidad deben evitarse en todo caso y las de alta calidad pueden emplearse de dos formas: como sustitutivo del pienso, siendo aproximadamente un 20% de la ración diaria, o como un complemento que constituirá aproximadamente un 5% de la ración diaria.


Frutas y verduras: son la mejor fuente de vitaminas. Deben emplearse con moderación, no debiendo superar el 5% aproximadamente de la ración diaria, deben ofrecerse lavadas y secas. Estos vegetales se ofrecen por la noche y se retiran los restos no consumidos por la mañana. Pero hay que tener cuidado porque hay algunas frutas y verduras que pueden ser toxicas por ello os dejo aquí una lista con las más apropiadas para ellos.
Frutas: manzanas, peras, albaricoques, plátanos, ciruelas, cerezas, uvas, fresas, higos y moras. Las frutas con “hueso” deben emplearse con precaución ya que muchas de las semillas son tóxicas y sólo se debe ofrecer a las chinchillas la parte carnosa.
Verduras: hojas secas de cardo, endivias, chicoria, patatas crudas (quitando todos los brotes, pues son tóxicos), zanahorias (tanto el tubérculo como las hojas), diente de león, lechuga (debe emplearse la variedad “romana” por su mejor contenido de calcio), tomates, guisantes, coles de Bruselas, espinacas, rábanos y trébol.

Complementos nutricionales: En determinadas épocas del año o en determinadas fases fisiológicas de las chinchillas puede ser conveniente la suplementación de la dieta con ciertos complementos. Los dos más importantes son los complejos multivitamínicos y los suplementos de calcio. Los complejos multivitamínicos deberían administrarse en los roedores dos veces al año durante un periodo de 2 a 4 semanas.

Golosinas: frutos secos, como nueces, avellanas o almendras. Son muy ricos en grasas y no debería darse más de uno a la semana. Otra cosa que les chifla a las chinchillas son las pipas de girasol. Un complemento alimenticio cuyo uso es muy recomendable por ser una buena fuente de fibra y facilitar el desgaste de los dientes es el pan duro.

2 comentarios:

giovanna dijo...

Referente a los hurones he leìdo un par de fallos..
Para empezar, es altamente peligroso retirarle las glàndulas perineanales ya que no disminuyen su olor y perjudica enormemente al animal a la hora de defecar perjudicandolo asì de por vida con un prolapso.
Y concluyo con la hora del baño, es conveniente hacerlo a los tres meses y no a las tres semanas. Cuàndo se baña a cualquier animal, lo que se hace es retirarle suciedad y grasa del cuerpo, al hacerlo tan seguidamente el animal cada vez va segregando màs cantidad de esa grasa y eso es exactamente lo que conocemos como "el mal olor del huròn".
Esto no quiere decir que no se pueda limpiar con una toallita humeda cada dìa, yo lo hago para limpiarle sus patitas y sus partes.

giovanna dijo...

Lo siento, he devido darle a este apartado sin darme cuenta